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terça-feira, 21 de maio de 2013

DELE



43.000 candidatos quieren obtener el diploma para ser profesor de español

larazon.es. Madrid.

Cerca de 43.000 candidatos se han inscrito durante el primer semestre del año para la realización de las pruebas de obtención de los Diplomas de Español como Lengua Extranjera (DELE). Los exámenes de la convocatoria de mayo se celebrarán los próximos días 24 y 25 en 537 centros repartidos por 95 países.

Los DELE son títulos oficiales que acreditan el grado de conocimiento del español y facilitan el acceso al mundo laboral y académico. Son expedidos por el Instituto Cervantesen nombre del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte de España, tienen validez indefinida y gozan de un amplio reconocimiento internacional.

La convocatoria de mayo es la que concentra el mayor volumen de aspirantes –las dos terceras partes de los candidatos anuales-, muy por encima de las que se celebran en agosto y en noviembre.

Italia, el país con más candidatos

Distribuidos por países, el mayor número de candidatos –un 37%- se registra en Italia, que incluso aumenta en dos puntos las cifras del año pasado. Le siguen España (7,8% del total de aspirantes), Grecia (6,5%), Francia (5%), China (4%), Brasil (3,7%), Corea del Sur (3,2%), Alemania (2,7%) y Japón (2,2%).

Los países que más han incrementado el número de candidatos son China (casi un 50% más), Brasil y Corea del Sur (más de un 20% cada uno).

Existen seis niveles adaptados al Marco común europeo de referencia y siete Diplomas de Español como Lengua Extranjera: DELE A1, A2, B1 (antes Inicial), B1 escolar, B2 (antes Intermedio), C1 y C2.

Los niveles más solicitados son los intermedios: casi las dos terceras partes de los candidatos (un 64%) aspiran a obtener un diploma B, frente a los diplomas A (24%) y C (11%).

Este mes de mayo marca el final del ciclo de vida de los exámenes DELE Inicial e Intermedio, cuyo formato y características han estado vigentes durante casi 20 años. A partir de la convocatoria del próximo mes de agosto, los exámenes para los diplomas B1 y B2 tendrán nuevos formatos de pruebas y tareas. También se modificarán los sistemas de calificación.

FUNDACIÓN DEL ESPAÑOL URGENTE


hombres de negro, en cursiva

La denominación hombres de negro, con la que popularmente se hace referencia a los inspectores de la troika, se escribe en cursiva (o entrecomillada, si no se dispone de este tipo de letra) puesto que su sentido no es el propio que indican las palabras que la conforman.

Es habitual leer esta denominación en los medios en frases como «Los hombres de negro llegan a España», «Los hombres de negro vuelven a España para examinar la reforma financiera».

Uno de los usos de la letra cursiva es el de marcar aquellas palabras y expresiones con valor figurado, es decir, con un sentido expresivo o metafórico que no es el propio de la palabra.

Por este motivo, lo adecuado es escribir hombres de negro en cursiva o, si no es posible, entrecomillado, de modo que en los ejemplos anteriores lo apropiado habría sido escribir «Los hombres de negro llegan a España», «Los hombres de negro vuelven a España para examinar la reforma financiera».

DICCIONARIO DE LOS NIÑOS COLOMBIANOS


Diccionario de niños colombianos sorprende a adultos

Arturo Wallace
BBC Mundo en Bogotá

Los niños produjeron cerca de 500 definiciones, que se transformaron en un libro de éxito
Son definiciones llenas de poesía y sabiduría, a pesar de la poca edad de sus autores. O tal vez por esa misma razón…
Van desde la A de adulto ("Persona que en toda cosa que habla, habla primero de sí mismo", según Andrés Felipe Bedoya, de 8 años), hasta la V de violencia ("La parte mala de la paz", en la definición de Sara Martínez, de 7 años).
La guía enseña a los padres a distinguir al niño 'travieso' del que precisa de atención especializada
La investigadora sostiene que los niños ociosos se tornan más creativos
El estudio minimiza el impacto de la TV en el comportamiento de los niños
El diccionario forma parte del libro "Casa de las estrellas: el universo contado por los niños", una obra que sorprendió al transformarse en el mayor éxito de la Feria Internacional del Libro de Bogotá, a fines del mes de abril. La sorpresa se produjo especialmente porque el libro fue publicado por primera vez en Colombia en 1999 y reeditado a comienzos de este año.
"Eso me hace pensar que el libro continua revelando, continua hablando sobre las pequeñas cosas", dice a BBC Mundo Javier Naranjo, que compiló las definiciones hechas por los niños colombianos.
"Ellos tienen una lógica diferente, otra manera de entender al mundo, otra manera de habitar la realidad y de mostrarnos muchas cosas que olvidamos", afirma.
Es así que, en el peculiar diccionario, el agua es una "transparencia que se puede beber", un campesino "no tiene casa, ni dinero. Solamente sus hijos" y Colombia es "un partido de futbol".

Sabiduría infantil

Adulto: Persona que en toda cosa que habla, habla primero de sí mismo (Andrés Felipe Bedoya, 8 años)
Anciano: Es un hombre que está sentado todo el día (Maryluz Arbeláez, 9 años)
Agua: Transparencia que se puede beber (Tatiana Ramírez, 7 años)
Blanco: El blanco es un color que no pinta (Jonathan Ramírez, 11 años)
Campesino: un campesino no tiene casa, ni dinero. Solamente sus hijos (Luis Alberto Ortiz, 8 años)
Cielo: De donde sale el día (Duván Arnulfo Arango, 8 años)
Colombia: Es un partido de futbol (Diego Giraldo, 8 años)
Dinero: Cosa de interés para los otros con la cual se hace amigos y, sin ella, se hace enemigos (Ana María Noreña, 12 años)
Dios: Es el amor con cabello largo e poderes (Ana Milena Hurtado, 5 años)
Oscuridad: Es como el fresco de la noche (Ana Cristina Henao, 8 años)
Guerra: Gente que se mata por un pedazo de tierra o de paz (Juan Carlos Mejía, 11 años)
Envidia: Tirar piedras a los amigos (Alejandro Tobón, 7 años)
Iglesia: Donde la persona va a perdonar a Dios (Natalia Bueno, 7 años)
Luna: Es la que nos da la noche (Leidy Johanna García, 8 años)
Madre: Mamá me entiende y después se va a dormir (Juan Alzate, 6 años)
Paz: Cuando la persona se perdona (Juan Camilo Hurtado, 8 años)
Sexo: Es una persona que se besa encima de la otra (Luisa Pates, 8 años)
Soledad: Tristeza que da en las personas algunas veces (Iván Darío López, 10 años)
Tiempo: Cosa que pasa para recordar (Jorge Armando, 8 años)
Universo: Casa de las estrellas (Carlos Gómez, 12 años)
Violencia: Parte mala de la paz (Sara Martínez, 7 años)
Fuente: libro Casa de las Estrellas: el universo contado por los niños, de Javier Naranjo
Además de eso, una de las definiciones de Dios pasa a ser "el amor con cabello largo y poderes", la oscuridad "es como el frescor de la noche" y la soledad es la "tristeza que la persona tiene algunas veces".
'Otra visión del mundo'
Las definiciones - casi 500, para un total de 133 palabras diferentes - fueron compiladas durante un período "de entre ocho y diez años", mientras Naranjo trabajaba como profesor en diversas escuelas rurales del Estado de Antioquía, en el este del país.
"En la creación literaria hacíamos juegos de palabras, inventábamos historias. Y la génesis del libro es uno de los ejercicios que hacíamos", cuenta él, que ahora es director de la biblioteca y centro comunitario rural Laboratorio del Espíritu.
Él cuenta que tuvo la idea de pedir a los alumnos una definición de lo que era un niño, durante una fiesta del Día del Niño.
"Recuerdo una definición que era: 'un niño es un amigo que tiene el cabello cortito, no toma ron y va a dormir más temprano'. La adoré, me pareció perfecta."
"Los niños escogieron algunas palabras y yo también: palabras que me interesaban, sobre las cuales yo me preguntaba. Pero no hui de ninguna", afirma Naranjo.
En el diccionario aparecen temas del cotidiano de Colombia, como guerra y "desplazado", persona que se desplaza por el país, generalmente huyendo de conflictos. Uno de los alumnos definió la palabra niño como "un perjudicado por la violencia".
Aprender a escuchar
Para la publicación, Naranjo corrigió la puntuación y la ortografía de las definiciones escogidas, mas afirma no haber eliminado ninguna de las palabras por "cuestiones ideológicas".
Por eso, el libro conserva la voz de los niños, con sus formas de explicar las cosas y construcciones gramaticales particulares. Bianca Yuli Henao, de 10 años, define tranquilidad como "por ejemplo cuando su papá dice que te va a pegar y después dice que no lo va a hacer".
El exprofesor dice que el respeto a la voz de los niños también es parte del éxito del libro, que fue reeditado en 2005 y 2009 e inspiró obras semejantes en México y en Venezuela.
Las ventas del libro ayudaron a financiar las actividades de la biblioteca actualmente dirigida por Naranjo, que continua convidando a los niños a hacer volar la imaginación con otras dinámicas.
"Nosotros adultos somos condescendientes cuando hablamos con los niños y debe ser lo contrario. Más que bajar, nosotros tenemos que ponernos a la altura de ellos. Estar a la altura de ellos es inclinarnos nosotros para mirar a los niños a los ojos y hablar con ellos cara a cara. Escuchar sus dudas, sus miedos y sus deseos", dice.


ORIGINAL EN PORTUGUÉS

Dicionário de crianças colombianas surpreende adultos18
Arturo Wallace
Da BBC Mundo em Bogotá

"As crianças têm um modo peculiar de entender o mundo", diz Javier Naranjo, que compilou as definições feitas por crianças colombianas
São definições cheia de poesia e sabedoria, apesar da pouca idade de seus autores. Ou talvez por isso mesmo.

Vão desde A de adulto ("Pessoa que em toda coisa que fala, fala primeiro de si", segundo Andrés Felipe Bedoya, de 8 anos), até V de violência ("A parte ruim da paz", na definição de Sara Martínez, de 7 anos).

O dicionário está no livro "Casa das estrelas: o universo contado pelas crianças", uma obra que surpreendeu ao se tornar o maior sucesso da Feira Internacional do Livro de Bogotá, no final do mês de abril. A surpresa aconteceu especialmente porque o livro foi publicado pela primeira vez na Colômbia em 1999 e reeditado no início desse ano.

Adulto: Pessoa que em toda coisa que fala, fala primeiro dela mesma (Andrés Felipe Bedoya, 8 anos)
Ancião: É um homem que fica sentado o dia todo (Maryluz Arbeláez, 9 anos)
Água: Transparência que se pode tomar (Tatiana Ramírez, 7 anos)
Branco: O branco é uma cor que não pinta (Jonathan Ramírez, 11 anos)
Céu: De onde sai o dia (Duván Arnulfo Arango, 8 anos)
Colômbia: É uma partida de futebol (Diego Giraldo, 8 anos)
Dinheiro: Coisa de interesse para os outros com a qual se faz amigos e, sem ela, se faz inimigos (Ana María Noreña, 12 anos)
Deus: É o amor com cabelo grande e poderes (Ana Milena Hurtado, 5 anos)
Escuridão: É como o frescor da noite (Ana Cristina Henao, 8 anos)
Guerra: Gente que se mata por um pedaço de terra ou de paz (Juan Carlos Mejía, 11 anos)
Inveja: Atirar pedras nos amigos (Alejandro Tobón, 7 anos)
Igreja: Onde a pessoa vai perdoar Deus (Natalia Bueno, 7 anos)
Lua: É o que nos dá a noite (Leidy Johanna García, 8 anos)
Mãe: Mãe entende e depois vai dormir (Juan Alzate, 6 anos)
Paz: Quando a pessoa se perdoa (Juan Camilo Hurtado, 8 anos)
Sexo: É uma pessoa que se beija em cima da outra (Luisa Pates, 8 anos)
Solidão: Tristeza que dá na pessoa às vezes (Iván Darío López, 10 anos)
Tempo: Coisa que passa para lembrar (Jorge Armando, 8 anos)
Universo: Casa das estrelas (Carlos Gómez, 12 anos)
Violência: Parte ruim da paz (Sara Martínez, 7 anos)

Fonte: livro "Casa das estrelas: o universo contado pelas crianças", de Javier Naranjo
"Isso me faz pensar que o livro continua revelando, continua falando sobre as pequenas coisas", disse à BBC Mundo Javier Naranjo, que compilou as definições feitas por crianças colombianas.

"Eles têm uma lógica diferente, outra maneira de entender o mundo, outra maneira de habitar a realidade e de nos revelar muitas coisas que esquecemos", diz.

É assim que, no peculiar dicionário, a água é uma "transparência que se pode tomar", um camponês "não tem casa, nem dinheiro. Somente seus filhos" e a Colômbia é "uma partida de futebol".

Além disso, uma das definições de Deus passa a ser "o amor com cabelo grande e poderes", a escuridão "é como o frescor da noite" e a solidão é a "tristeza que a pessoa tem às vezes".

'Outra visão do mundo'

As definições - quase 500, para um total de 133 palavras diferentes - foram compiladas durante um período "entre oito e dez anos", enquanto Naranjo trabalhava como professor em escolas rurais do leste do país.

"Na criação literária fazíamos jogos de palavras, inventávamos histórias. E a gênese do livro é um dos exercícios que fazíamos", conta ele, que agora é diretor da biblioteca e centro comunitário rural.

Ele diz que teve a ideia de pedir aos alunos uma definição do que era uma criança, em uma comemoração do dia das crianças.

"Me lembro de uma definição que era: 'uma criança é um amigo que tem o cabelo curtinho, não toma rum e vai dormir mais cedo'. Eu adorei, me pareceu perfeita."

"As crianças escolheram algumas palavras e eu também: palavras que me interessavam, sobre as quais eu me perguntava. Mas não fugi de nenhum", afirma Naranjo.

No dicionário aparecem temas do cotidiano da Colômbia, como guerra e "desplazado", pessoa que se desloca pelo país, geralmente fugindo de conflitos. Um dos alunos definiu a palavra criança como "um prejudicado pela violência".

Aprender a escutar

Para a publicação, Naranjo corrigiu a pontuação e a ortografia das definições escolhidas, mas afirma não ter tirado nenhuma das palavras por "questões ideológicas".

Por isso, o livro mantém a voz das crianças, com suas formas de explicar as coisas e construções gramaticais particulares. Bianca Yuli Henao, de 10 anos, define tranquilidade como "por exemplo quando seu pai diz que vai te bater e depois diz que não vai".

O ex-professor diz que o respeito à voz das crianças também é parte do sucesso do livro, que foi reeditado em 2005 e 2009 e inspirou obras semelhantes no México e na Venezuela.

As vendas do livro ajudaram a financiar as atividades da biblioteca atualmente dirigida por Naranjo, que continua convidando as crianças a deixar a imaginação voar com outras dinâmicas.

"Nós adultos somos condescendentes quando falamos com as crianças e deve ser o contrário. Mais que nos abaixarmos temos que ficar na altura deles. Estar à altura deles é nos inclinarmos para olhar as crianças nos olhos e falar com elas cara a cara. Escutar suas dúvidas, seus medos e seus desejos", diz.

ROBERTO BOLAÑO


«2666» es elegida la novela más influyente en el ámbito de la lengua española
MANUEL DE LA FUENTE@MANOLHITO / MADRID

Bolaño abre el camino del éxito a la novela en español del siglo XXI


Roberto Bolaño dejó escrita «2666» al morir en 2003 y se publicó póstumamente
El pasado domingo, se ponían en ABC unos cuantos puntos sobre las íes de la novela española de los últimos años, de lo que llevamos de siglo narrativamente hablando. Tan español como peruano, Mario Vargas Llosa y su «Fiesta del chivo» salían vencedores en esta lid literaria. Pero también llegaron hasta la redacción de ABC opiniones que abundaban en que la mejor novela en lengua española venía de aquel lado del Atlántico. Y era «2666» de Roberto Bolaño.

Quizá porque, como opina rotundamente el novelista argentino afincado en nuestor país Patricio Pron, «ninguna novela de autor español reciente ha ejercido la influencia de obras como Roberto Bolaño». Añade que «sintetiza y pone punto final a varias de las tendencias dominantes en la novela del siglo XX al tiempo que inaugura otras más propias del siguiente siglo» y «sigue generando efectos a diez años de su publicación».

Y Bolaño y «2666», su novela póstuma, eran las palabras mágicas con las que numerosos escritores suramericanos (y también un buen puñado de españoles) respondían a nuestra pregunta. Entre estos últimos, por ejemplo, Andrés Ibáñez: «Bolaño fue el último de los grandes genios, y uno de los misterios más grandes que ha dado el arte de la novela». Quizá la vida de Bolaño, poco ortodoxa, estuvo casi por encima de su obra, la de un autor de culto, que ya residente en España compaginó el principio de su tarea narrativa) con un trabajo de vigilante nocturno en un camping de Castelldefels, sin ir más lejos.

El también argentino Rodrigo Fresán hilvana esta relación: «El merecido éxito de Bolaño propone, además, una fuerte radiación que trasciende lo estrictamente estricto y que ya resulta tan positiva y arriesgada (a la hora de reflejar el cómo vivir la literatura) como negativa y riesgosa (la ambición de vivir de la literatura apoyado en cierto perfume legendario y mítico que a Bolaño nunca le interesó) potenciando la figura del escritor por encima de su obra».

Ante «2666», la lista de admiradores es larga. Para Isaac Rosa, «no hay ninguna de su ambición en lo que va de siglo», opinión en la que abunda el mexicano Jorge Volpi, en tanto que Andrés Neuman es otra de esas voces nacidas en América pero criadas literariamente a este lado del Charco «2666, una catedral de búsquedas, tramas y lirismo brutal».

Hay otros españoles que admiran esta descomunal obra de Roberto Bolaño: Luis García Jambrina («2666 es, una demoledora alegoría de nuestro tiempo») y Sergi Doria («el testamento de un autor enfermo de literatura»). Tampoco Fernando Rodríguez Lafuente, director de ABC Cultural, escapa al hechizo de Bolaño y «2666»: La consagración del horror contemporáneo. La literatura en estado puro». No faltan los devotos de Bolaño en la mismísima Real Academia, donde su secretario, Darío Villanueva, habla de «2666» como una obra de «monumentalidad póstuma» y Carme Riera subraya lo que la descomunal novela tiene «de innovador en la literatura latinoamericana».

Como hace unas líneas apuntaba Patricio Pron, novelas como «2666» sí que influyen allende las fronteras de la lengua española, como recuerda bien Anna Grau, periodista y escritora que recuerda a Bolaño al hilo de sus tiempos de corresponsal en Nueva York «Allí comprobé que es de los pocos autores hispanos que despiertan un verdadero interés, respeto y hasta perplejidad en el mundo anglosajón».

Novelas españolas y novelas escritas en español. Quizá el poeta y novelista Manuel Vilas sea quien lanza el último y más osado dardo. «2666 demuestra que un escritor en lengua española puede escribir una novela desde la inteligencia , y no el exotismo y el pintoresquismo».

El aullido de un genio
JORGE HERRALDE MADRID
¿Cómo definir a Roberto Bolaño? Una empresa condenada al fracaso; como máximo hay que proceder por aproximaciones. Por ejemplo, su radicalidad estética, ética y política, tan insobornables, diría, como inevitables, desde aquel joven adolescente en México, con gestos dadaístas, bajo el signo de Rimbaud, un desesperado escribiendo para desesperados, pese a las advertencias del pragmático sentido común.
Ya en España, desde 1977, según nos cuenta en el prólogo de «Monsieur Pain», malvive gracias a certámenes de provincias. Pese a haber logrado después premios importantes «ninguno ha sido sin embargo tan importante como estos premios desperdigados por la geografía de España, premios búfalo que un piel roja tenía que salir a cazar pues en ello le iba la vida».
Puso la literatura siempre por encima de todas las cosas, un explorador audaz, un buceador a pulmón libre, un trapecista sin red. En su cuento ‘El retorno’, de «Putas asesinas», el narrador buscaba en las noches de París «aquello que no encontraba en mi trabajo ni en lo que la gente llama vida interior: el calor de una cierta desmesura». En el caso de Bolaño, por el contrario, el trabajo de la escritura y el buscar en la vida interior eran el carburante de la desmesura necesaria.
Y también, bajo el caparazón de hombre duro (pero no había que rascar mucho) una persona tierna, cálida y muy generosa y tan elegante, un dandy enmascarado, afirmaciones que si Roberto estuviera vivo no me atrevería a hacer, me parecería indecoroso, como quebrantar un pacto implícito. Su muerte, como la de Carmiña Martín Gaite, han sido el mayor dolor de toda mi vida de editor.

Jenaro Talens



"La poesía no se presta a la mentira"



ALBERTO OJEDA | Publicado el 21/05/2013

El poeta y ensayista pronuncia la conferencia 'Poesía y verdad: del nombre inexacto de las cosas' este martes en la Fundación Juan March

Jenaro Talens (Cádiz, 1946) toma el testigo esta semana en el ciclo Poética y poesía organizado por la Fundación Juan March y en el que han participado ya 30 poetas: Joan Margarit, Olvido García Valdés, Luis Antonio de Villena, Luis García Montero... Un proyecto que ha cristalizado en una publicación multimedia a caballo entre el ebook y el audiolibro. El autor gaditano (poeta, ensayista, traductor, profesor universitario...) reflexionará este martes sobre la relación entre la poesía y la verdad, un binomio bien compensado a su juicio, porque, afirma, mediante el verso "no es posible mentir". El autor leerá, además, este jueves una antología de toda su obra, cuyo origen se remonta a 1964, cuando publicó El umbral del hombre. Talens también descubrirá algunas composiciones de su próximo libro, todavía en el telar.

Pregunta.- En su conferencia reflexiona sobre la relación entre la poesía y la verdad. ¿En qué medida se puede alcanzar la segunda a través de la primera?
Respuesta.- Aunque el lenguaje parece que está hecho para mentir, la poesía no lo permite, no se presta. Aunque uno intente controlar lo que dice, el lenguaje poético tiende a decir la verdad. Una verdad en un sentido amplio, no como un concepto cerrado. Salvo si escribe con mucha premeditación, no se puede engañar en poesía.

P.- ¿Entonces diría que la lengua, en el territorio de la poesía, no se puede domesticar?
R.- Los efectos del sentido de lo que se dice son incontrolables. Lo único que se puede hacer es establecer uno límites de pertinencia para que a uno no le hagan decir lo que no quiere. Eso se consigue con oficio.

P.- Y el jueves leerá algunos poemas suyos, de todas sus épocas. ¿Qué siente cuando lee sus versos de hace 40 años?
R.- Pues me siento raro. Igual que cuando miro una foto de esa época. El año que viene se cumple medio siglo de la publicación de mi primer libro, El umbral del hombre. Pero a la hora de hacer la antología para este ciclo no he intentado disimular quien fui, aunque a veces aprecie torpezas o ingenuidades.

P.-¿Y desde esa ingenuidad hacia donde ha evolucionado en todo este tiempo?
R.- Hay claves que se mantienen. Sobre todo la voluntad autorreflexiva. Ahora, como entonces, sigo intentando comprender el mundo a través de la poesía. Y es curioso que, a pesar de esa ingenuidad, percibo la imposibilidad de controlar el lenguaje que comentaba: en esos versos hay mucho más de lo que creía. A estas alturas, después de todos los años que he cumplido, los libros que escrito sobre poesía, la actividad académica que he desarrollado, las preocupaciones no se han modificado. Quizá se hayan ampliado, sin sustituirse la unas a las otras, y las aborde con algo más de escepticismo, porque cada vez creo en menos cosas.

P.- Una de esas preocupaciones es el yo, la identidad. Dice que usted no escribe de ti, sino desde ti. ¿Qué quiere expresar con esta diferenciación?
R.- Cierto. Esa es un tema esencial en mi poesía. Siempre he tenido muy presente el mandato presocrático de "llega a ser quien eres". La identidad no es algo que viene dado con el nacimiento, sino que se va construyendo, en un largo proceso. Cierta poesía lírica se entiende como un ejercicio confesional. Yo no comparto esta perspectiva. No es necesario contar tus problemas para expresar tu experiencia.

P.- En la conferencia del martes saca a relucir su vertiente de teórico de la poesía. Pero le molesta que su obra se tilde de metapoética. ¿Por qué?
R.- Yo eso de la metapoesía no lo entiendo muy bien. El lenguaje es la ordenación de un universo de referencias. ¿Entonces la metapoesía es la reordenación de algo ya ordenado? Me parece redundante. El lenguaje es la herramienta necesaria pero no el protagonista de la poesía.

P.- En 2011 publicó El cielo ávaro de esplendor, su último poemario. ¿Cuándo podremos leer el siguiente?
R.- El jueves leeré un par de poemas inéditos. Forman parte de una colección nueva, un libro que ya está hecho y en el que la poesía dialoga con la fotografía. Lo he dejado reposar de momento, que es lo que hago siempre.

LA LENGUA VIVA


A vueltas con las falas
Amando de Miguel

Ya veo que el resurgimiento de las falas regionales resulta polémico. Elva Fernández se refiere al caso asturiano. Muchos rapaces han aprendido la fala en la escuela, pero no se entienden con sus abuelos de la aldea. Y es que los chicos han aprendido el bable normalizado, que es algo así como una especie de esperanto. Mi opinión es que cualquier revitalización de una lengua pasa por normalizar su gramática y su ortografía. Eso es lo que se hizo con el castellano hace 500 años, con el catalán o el gallego hace cien años y con el vascuence hace menos tiempo. En un primer momento ese impulso normalizador tiende a alejar el idioma culto del popular. Lo fundamental es que se cree pronto una literatura; de lo contrario, el idioma no pasa de ser una especie de dialecto hablado. Es lo que ocurre con la mayor parte de las lenguas del mundo. Es muy difícil revitalizar una lengua regional cuando convive con otra de comunicación internacional, como es hoy el castellano. La ley del mínimo esfuerzo hace que la lengua regional sea desplazada.

Manuel Asur tiene grandes dudas sobre la posibilidad de que pueda surgir una literatura potente para el asturiano. La razón es que se trata de una lengua hablada en las zonas rurales, que se ha perdido del todo en las ciudades. Y eso que reconoce "la riqueza intrínseca del bable: sus expresiones peculiares, sus resonancias ancestrales, su belleza medieval aún conservada, su familiaridad tan despreciada". Francamente, me parece que esas cualidades se pueden asignar a todas las lenguas. Para don Manuel el inconveniente principal para la extensión del bable es su falta de uso en la vida corriente y lo artificioso que resulta el bable normalizado.

M. Doncel es todavía más crítico, y aun ácido. Le parece ridículo el intento de revitalizar el guanche en Canarias, un idioma perdido del que no se conserva ni el alfabeto. Su opinión es que no debe gastarse dinero público para revitalizar las lenguas regionales o locales.

José Luis García Valdecantos comenta con sarcasmo algunas peculiaridades del bable asturiano, que los graciosos denominan béibol. Por ejemplo, el grito de ¡Puxa, Asturies! es un invento fallido. Nunca se dijo Asturies (que sería un plural, y Asturias es singular). Por otra parte, el imperativo puxa (= empuja) es lo que decían las madres a los nenes en el orinal para que hicieran caca.

María Jesús Fernández me pide que le diga la traducción de tuquinos, que se emplea en Asturias. Consulto con José Cuevas y me dice que tuquinos no es más que el diminutivo asturiano para tucos, que es lo mismo que tacos, cuñas, nudillos. Añado que en arquitectura se utiliza mucho lo de ripios, materiales pequeños para rellenar huecos o apoyar piedras. En mis operaciones de jardinería recurro mucho a los ripios, que a partir de ahora llamaré tuquinos. Todos los días se aprende algo.

COMUNICACIÓN DEPORTIVA


Guía de pronunciación para la cobertura periodística de grandes eventos deportivos internacionales

Los medios de comunicación deportivos han adquirido una especial relevancia como fuente cotidiana de consulta e información principal para muchos ciudadanos, que se sienten atraídos por la emoción y el espectáculo que rodean a las principales competiciones e incluso directamente implicados cuando algún deportista o equipo les representa frente a otros países en acontecimientos internacionales. En este contexto, el periodismo deportivo audiovisual, por el poder de seducción del hilo radiofónico y por la enorme capacidad hipnótica de la imagen televisiva, concentra gran parte de la atención constituyéndose como un elemento decisivo en la conformación de las mentalidades, los comportamientos, los valores y, en suma, la educación de los ciudadanos.

Se trata, por tanto, de un tipo de periodismo global y de alto impacto social que hace más que pertinente la existencia de herramientas que permitan a los profesionales solventar con garantías de éxito y el máximo rigor posible su labor diaria de informar y entretener a partir de un correcto uso del lenguaje en sus registros escrito y hablado. De esta forma, se hace necesaria una adecuada pronunciación en este ámbito que favorezca la comprensión de los mensajes por parte del público.

Sobre todo ello versa Alto y claro. Guía de pronunciación para la cobertura periodística de grandes eventos deportivos internacionales, un libro elaborado por profesores de la Universidad de Sevilla que aborda un campo hasta ahora poco explorado como es la pronunciación de nombres de origen extranjero entre los profesionales de la información televisiva o radiofónica en general, y en el ámbito periodístico deportivo en particular, donde las referencias a competiciones de otros países y a fichajes de jugadores foráneos son constantes.

Como se indica en la presentación de la obra, esta tiene un cariz divulgativo, pero ajustándose a criterios puramente científicos. Se trata de un estudio interdisciplinar y de índole práctica ya que se dirige, más que a expertos en fonética, a profesionales que trabajan en los medios de comunicación y a todos aquellos ciudadanos en general que encuentren dificultades a la hora de pronunciar voces foráneas. Así, no se trata tanto de lograr que todos pronuncien perfectamente los sonidos, sino, sobre todo, de acercar al público el conocimiento de las reglas de cada lengua y procurar que la pronunciación sea lo más correcta posible dentro de la inteligibilidad, un aspecto clave cuando hablamos de comunicación.

El estudio aborda, por un lado, un problema esbozado en algunos libros de estilo, apuntado de manera frecuente por radioyentes, telespectadores e incluso por internautas, pero que todavía no se había visto plasmado en una obra tan específica. Por otra parte, afronta el problema de la pérdida de calidad informativa en los medios desde una nueva perspectiva, a través de la identificación de los errores más comunes en la locución cotidiana y del perfeccionamiento del nivel de pronunciación de nombres de origen extranjero.

En el libro se analizan los idiomas más representativos del mapa deportivo europeo y mundial, tanto por su elevado número de hablantes como por su proximidad y vinculación cultural con la lengua española: inglés, francés, alemán, italiano y portugués. Para la transcripción del inglés, se ha seguido el modelo de pronunciación recibida del inglés o Received Pronunciation (RP), que es el acento del inglés británico estándar o neutro, también conocido popularmente como el inglés de la Reina o, de forma tradicional, como el inglés de la BBC. Asimismo, para la lengua portuguesa se ha escogido la pronunciación del portugués europeo.

La obra se estructura en tres partes bien diferenciadas. En la primera se presenta el problema que se aborda, esto es, la dificultad que supone para muchos profesionales de la comunicación de medios audiovisuales la pronunciación de voces foráneas y los errores que se cometen habitualmente como consecuencia de ello. Al mismo tiempo, se expone la casi inexistencia de manuales específicos y de menciones en libros de estilo que permitan a los periodistas aprender las reglas de pronunciación de palabras extranjeras y adquirir la competencia para mejorar la locución y la calidad de la emisión de los mensajes.

Una segunda parte incide en la explicación de unas normas básicas de pronunciación de cada uno de los cinco idiomas mencionados. En cada uno de los capítulos, se explican de forma concisa las peculiaridades fonológicas generales de cada lengua, los tipos de sonidos, así como claves para la transcripción fonética. Las transcripciones formales se realizan a partir del Alfabeto Fonético Internacional (AFI), tabla de símbolos fonéticos normalizados que permiten transcribir el conjunto de fonemas de todas las lenguas del mundo y que se ha impuesto como una norma de hecho.

Además, con el fin de facilitar la comprensión del lector, se incluye una propuesta de pronunciación simplicada o aproximativa, para diferenciarla de la formal y que consiste en la utilización de símbolos fonéticos a partir de las grafías existentes en español, de forma que los sonidos sean más claramente identificables para cualquier persona hispanohablante que no tenga conocimientos de fonética.

A partir de esas pautas, se ofrece un glosario de casi un millar de nombres propios para ayudar a solventar problemas. Este listado de antropónimos (deportistas y entrenadores), topónimos (ciudades, países y recintos deportivos) y equipos y competiciones. Para la elaboración de esta guía, se han tomado como referencia los deportistas y equipos más destacados de cada una de las disciplinas, no solo las que forman parte del cartel de unos Juegos Olímpicos, sino también aquellas otras que no son olímpicas (al menos, por el momento) pero que sí son relevantes por su repercusión mediática y aceptación entre los aficionados, tales como el automovilismo o el motociclismo.

Con el fin de agilizar su consulta, este listado de nombres va precedido de una guía de abreviaturas de idiomas y deportes, y se ordena de dos maneras diferentes, tanto por idiomas como por disciplinas, en ambos casos por orden alfabético. Todo ello va acompañado de un CD audio que sirve para ejemplificar lo aquí explicado y que recoge la pronunciación de todas las voces incluidas en los glosarios en sus respectivos idiomas.

La obra, publicada por la editorial Visión Libros, está coordinada por María Heliodora Cuenca, profesora titular de Filología Inglesa, y por José Luis Rojas, periodista y profesor asociado de Periodismo, ambos de la Universidad de Sevilla, y cuenta como prologuista a Isaías Lafuente, periodista de la Cadena SER. Como autores también figuran los profesores Juan-Fadrique Fernández (alemán), Luis Fernando Rodríguez (Inglés), Fernando Molina Castillo (Italiano), Eric Luca Jorreto (Francés) y Conceiçao Lucas da Silva (Portugués).

Los responsables técnicos de la obra son Marina Barrio (Laboratorio de Fonética de la Universidad de Sevilla) y Pablo Anaya (ingeniero técnico en Informática de Sistemas), y los informantes que han participado en la locución son Tiago da Souza (Inglés), Victoria Frensel (Alemán), Juan Jiménez Salcedo (Francés), Alessandra Verde Rogliatti (Italiano) y Conceição Lucas da Silva (Portugués).
Publicado por José Luis Rojas Torrijos en 10:00

FUNDACIÓN DEL ESPAÑOL URGENTE


statu quo, no status quo

Statu quo, y no status quo, es la grafía correcta de la expresión latina empleada para referirse al ‘estado de un asunto o cuestión en un momento determinado’.

En consecuencia, en frases como «Algunos analistas piensan que la capacidad de influencia china sobre Pionyang es limitada y que tampoco tiene mucho interés en modificar el status quo en la península» o «Sus perspectivas radicales y de extrema derecha rompieron el molde de la política británica, cambiando el status quo de manera tan contundente…», lo apropiado habría sido emplear la forma statu quo.

Además, tal como indica el Diccionario panhispánico de dudas, es invariable en plural (los statu quo) y se pronuncia [estátu-kuó], no [estátu-kúo].

Se recuerda asimismo que, como el resto de las locuciones latinas, y de acuerdo con la última Ortografía, lo adecuado es escribirla en cursiva o, si no se puede usar este tipo de letra, entre comillas.

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