Translate

domingo, 5 de junho de 2011

ORTOGRAFÍA DE LA LENGUA ESPAÑOLA



Escribir para comunicar
DARMA L. ZAMBRANA
dzambrana@laestrella.com.pa


Como una obra concebida desde la unidad para la unidad, ha sido definida la última ‘Ortografía de la lengua española’ presentada esta semana en Panamá, tras ocho años de trabajo conjunto de las veintidós organizaciones que integran la Asociación de Academias de la Lengua Española que resultó en el primer conjunto consensuado de normas para la correcta escritura del idioma español.

‘Tarde o temprano los seres humanos tenemos que comunicarnos por escrito y nuestro deber fundamental es que se nos entienda’, fueron las palabras de la Presidenta de la Academia Panameña de la Lengua, Berna Pérez Ayala de Burrell, durante la presentación del documento que reemplaza al editado en 1999 y que fue presentado oficialmente en Madrid en diciembre de 2010, para recorrer todos los países hispanoamericanos a partir del presente año. Idea que fue apoyada por la ministra de educación, Lucy Molinar quien manifestó su preocupación porque ‘estamos perdiendo la capacidad de comunicarnos porque no estamos trabajando la lengua’

La Sala Panameña de la Biblioteca Nacional ‘Ernesto J. Castillero’ del Parque Omar, estaba llena a rebosar la noche de la presentación de la nueva obra con un público integrado en gran parte por jóvenes estudiantes universitarios y colegiales además de profesores de español y literatura, escritores y representantes del cuerpo diplomático acreditado en Panamá.

Este conjunto de recomendaciones, que ‘no implica interferencia en la libertad que tiene cada hablante o cada país de seguir aplicando a las letras los términos que venía usando, algunos de ellos (como la ’i griega’) con larga tradición de siglos", como se ha establecido en la redacción final de la obra, es de una importancia vital para la conservación de nuestro idioma. ‘Un tesoro sin igual, nuestro petróleo, que debe ser valorado y protegido’, a juicio del embajador de España en Panamá, Jesús Silva Fernández, quien participó en el lanzamiento del volumen como uno de los patrocinadores del evento.

Francisco Javier Pérez, director de la Academia Venezolana de la Lengua y coordinador de la obra en el área del Caribe continental, destacó el trabajo que realizaron los representantes de las 22 asociaciones hispanohablantes a partir del año 2002 cuando se decidió revisar la anterior edición del texto de la ‘Ortografía de la lengua española’ que estaba vigente desde 1999. En su opinión, ‘no hay obra perfecta en materia de gramática y es mejor que esta tenga fallas para que hagamos otra mejor dentro de diez años’.

Su rasgo más relevante es que se trata de una ortografía panhispánica y, aunque sus normas son comunes a todo el ámbito hispánico, la ejemplificación procura recoger muestras de los distintos países.

ESTRUCTURA DE LA OBRA

La obra consta de dos partes y cuatro apéndices distribuídos en 744 páginas.

La primera parte se refiere al sistema ortográfico del español y comprende la representación gráfica de los fonemas y el uso de las letras o grafemas. La representación gráfica del acento y el uso de la tilde. El uso de los signos ortográficos. El uso de las mayúsculas y minúsculas y la representación gráfica de las unidades léxicas.

La segunda parte toca la ortografía de expresiones que plantean dificultades específicas, es decir expresiones procedentes de otras lenguas, la de los nombres propios y la de las expresiones numéricas.

Contiene también cuatro apéndices: una lista de abreviaturas, otra de símbolos alfabetizables, una tercera de signos no alfabetizables y la última, una lista de países y capitales con sus gentilicios. Finalmente incorpora una nómina de textos citados: autores y obras, publicaciones periódicas y portales electrónicos.

ALGUNOS CAMBIOS

Los cambios más importantes se refieren a los monosílabos con diptongo ortográfico del tipo de ‘guion’, ‘truhan’, "Sion", "Ruan", "hui" o "riais", aunque haya zonas, como sucede en España, donde se pronuncian con hiato y se perciban como bisílabos. La nueva Ortografía dice con claridad que estas palabras "se escribirán siempre sin tilde".

Además, el adverbio ‘solo’ podrá o no llevar el acento gráfico, lo mismo que los pronombres demostrativos. También se elimina la tilde a la letra ‘o’ entre números. En cambio, la decisión de unificar los nombres de las letras ‘y’, ‘b’ y ‘v’ queda sólo en una recomendación. En tanto ‘ch’ y ‘ll’ se suprimen oficialmente como letras del alfabeto.

Algunas de las innovaciones que contenía esta edición se hicieron públicas a principios de noviembre de 2010 y causaron una gran polémica, entre ellas la decisión de unificar los nombres de las letras del alfabeto y querer llamar "ye" a la "i griega"; "be" a la "be larga", "be alta, "be grande", y "uve" a la "ve corta", "ve chica" o "chiquita", "ve pequeña", entre otros cambios.



LA RECOMENDACIÓN DIARIA:

  LA RECOMENDACIÓN DIARIA el maratón  y  la maratón ,   formas adecuadas   La palabra  maratón  puede emplearse tanto en masculino  ( el mar...