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domingo, 9 de fevereiro de 2014

IDIOMA LADINO ESPAÑOL





El ladino, una lengua memoriosa y libre que camina hacia la extinción
En ella, el ingenioso hidalgo "Don Kishot de la Mancha" es "un senyor de akeyos ke tenian una lansa en el raf, un eskudo antiguo, un kavayo viejo i flako, i un perro kasador" en el libro "Por mi boka" (Lumen, 2014), de Moscona y Sefamí.
EL UNIVERSAL - Venezuela


México.- Dos escritores mexicanos lanzaron una edición bilingüe en ladino y español, con textos de la diáspora sefardí y fragmentos de literatura antigua y contemporánea, para acercar a los lectores a la "casa perdida" en que se convirtió el judeoespañol hace más de cinco siglos.

Versos de "Dibaxu" (1994), de Juan Gelman, los cantos de "Martín Fierro" (1872) y el primer capítulo de "El Quijote" de Cervantes, escritos en ladino ("En un lugar de la Mancha del kual no quero akordarme el nombre, biviya, no muncho tiempo antes...") son algunos de los textos reunidos por Myriam Moscona y Jacobo Sefamí en esta obra, que acaba de ser publicada en México.

En ella, el ingenioso hidalgo "Don Kishot de la Mancha" es "un senyor de akeyos ke tenian una lansa en el raf, un eskudo antiguo, un kavayo viejo i flako, i un perro kasador" en el libro "Por mi boka" (Lumen, 2014), de Moscona y Sefamí.

El libro rescata la tradición de la literatura sefardí con la publicación de fragmentos como el "Meam Loez", escrito a partir de 1730 en Constantinopla, pero llega hasta los tiempos actuales al rescatar trabajos originales en ladino del pasado siglo de la poetisa argentina Denise León y del novelista francés Marcel Cohen, entre otros autores.

En entrevista con Efe, Moscona, descendiente de búlgaros sefardíes, explica que la obra "es un registro de una memoria de la literatura escrita directamente en judeoespañol" y de "escritos de excelencia" que lo que pretendió es "traer el ladino al día de hoy".

También llamado judeoespañol, sefardí, djudió, yahudice y spanyoliko, el ladino es "la lengua que se llevó una comunidad cuantiosa de la península Ibérica tras su expulsión a finales del siglo XV".

Originariamente, "fazer el ladino" se le denominaba al "hecho de pasar a letras latinas textos litúrgicos que originariamente estaban escritos en hebreo (...) Pero ya se usa para designar a una lengua", agrega Moscona.

La poetisa considera al ladino una "lengua secreta que subyace bajo el español" y que tuvo una enorme capacidad de supervivencia en el proceso de dispersión que acompañó su desarrollo durante siglos.

Es normal que "una comunidad, al ser expulsada, se lleve su lengua", pero es "inexplicable (...) que durante 500 años, en países donde las lenguas vernáculas no tienen nada que ver con el castellano, esta lengua se haya quedado viva como un aglutinante que unía en el amor a España a toda esa población", que "nunca dejó de suspirar por ese volver", señala.

Considerado por la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) un idioma "en vías de extinción", para Moscona también es un tesoro que se está muriendo.

"No sé cuántos hablantes tenga hoy en día el judeoespañol, pero lo que sí sé es que los niños no lo hablan", a pesar de que estuvo cinco siglos vivo en las familias de la diáspora.

Uno de los mayores golpes los recibió en el Holocausto, que implicó la muerte de "cientos de miles" de sus hablantes, señala la escritora.

"Por muchas razones que tienen que ver, desde el exterminio de la mayoría de sus hablantes durante la Segunda Guerra Mundial hasta la creación del Estado de Israel" en 1948, añade.

Recuerda que el hebreo, "que no era una lengua viva" sino "litúrgica", fue decretado idioma oficial en Israel, no así "el yiddish y el ladino, lo cual es una verdadera pena, y así el judeoespañol se fue perdiendo".

Para el profesor y crítico literario Jacobo Sefamí, el libro "ilustra muy bien que es una comunidad que no tiene una academia, una normativa para escribirlo, para hablarlo".

"Me parece fascinante que una lengua sea tan libre", agrega, razón por la cual los textos en ladino respetan "la ortografía de cada uno de los autores".

El también profesor de la Universidad de California, que no habla el judeoespañol porque su abuelo, quien sí lo hacía, murió cuando él era muy niño, confiesa que tiene una relación muy especial con esa lengua.

"El ladino es mi casa perdida, una casa que no existe más porque en mi casa ya no se habla esa lengua, pero que de todas maneras quiero conocer", afirma.

LINGÜISTICA ESPAÑOLA







Mi polémica por la lingüística española
por José Enrique Centén en Diario Siglo XXI - España



Desde que me sumergí en el tema del español como la lengua vehicular de nuestro Estado y en el mundo (no se de país con más de una lengua oficial). Defiendo que el español es y debe ser la única lengua vehicular del Estado en todas las áreas y comunidades, sin olvidar el idioma de cada una. Quien ejerce la imposición es aquella autonomía que en sus administraciones locales imponen la lengua autóctona para acceder a ellas, mientras que en la administración del resto de la nación solo se hace en español, pudiéndose presentar cualquier ciudadano del resto de España. También hay comunidades que recomiendan, en un plazo prudente, aprender el idioma autóctono aprobando previamente la oposición en español, algo razonable. Esta exposición me ha acarreado improperios y algunas críticas, a los primeros no pienso contestar a los segundos, intentaré en hacerles comprender que no estoy en contra de las distintas lenguas vernáculas de nuestro país, intentaré de alguna manera aclarar su equivocación y mi postura, alguna basada en la Bibliografía que marco.

“Estas hablando del castellano, una lengua románica, que ha sido impuesta en un país que no es real como es el caso de España. De haber cambiado el final en alguna batalla del medievo podríamos hablar lenguas lusofonas o ¿serian español? y ¿Qué pasa con el resto de lenguas? el gallego, el catalán, el babel, el castúo, la fabla aragonesa ¿son variantes del castellano? o son ¿variantes del español?”

“Efectivament, l'espanyol no existeix, es parla castellà, galego, euskera ...”

“El meu pare era immigrant i la meva mare de Figueres, els dos republicans i del PSUC, i en això em van educar. Gràcies a aquestes opinions tan espanyoles, molts dels que hem cregut en un projecte federal, a dia d'avui no dubtem quel'única sortida és la independencia”.

En todo el mundo cuando se refieren a nuestro idioma, lo hacen diciendo el idioma español, solo en España muchos se refieren a él como castellano, el castellano ya no se habla, hablamos un idioma que partiendo del castellano se enriqueció con los distintos idiomas de nuestra patria y los de allende de nuestros mares1. Y el resto de las lenguas autóctonas se mezclaron con otras para enriquecerse igual que el castellano, esas lenguas han evolucionado adaptando palabras del español. añadiendo o quitando una o más letras para parecer propias, o vocablos de otros idiomas (merci o vergogna - para que desaparezca la ñ-), están en su derecho, pero de ahí a decir que su idioma es puro va un abismo. Dicen que hablamos el castellano, pero no es así, una muestra de castellano es:

“Cono aiutorio de nuestro dueno Christo, dueno /salbatore, qual dueno /get ena honore et qual duenno tienet ela mandatione cono Patre cono Spiritu Sancto enos sieculos delo sieculos. Facanos Deus Omnipotens tal serbitio fere ke denante ela sua face gaudioso segamu”.

Todo empezó bajo el gobierno del imperio romano, año 19, la región se hizo conocida como Hispania, y sus habitantes aprendieron el primer idioma como tal, el latín de los comerciantes, colonizadores, administradores y soldados romanos. Cuando el latín clásico de las clases educadas de Roma se mezcló con las lenguas pre-romanas de los iberos, celtas y cartagineses, apareció una lengua llamada latín vulgar. Siendo el origen de muchas de las lenguas autóctonas criadas en la Península Ibérica, entre ellas el castellano y el catalán que crecieron juntas, y como lenguas hermanas se han prestado muchas cosas a lo largo de los siglos. Por eso en español encontramos hoy un número nada desdeñable de léxicos de minorías lingüísticas.

Documentos escritos, establece cinco lenguas pre-romanas en la Península: celta, ibero, cartaginés, griego y fenicio, además del vasco que, para otros autores como Schmoll o Untermann no era una de las lenguas que existían en España antes de la llegada de los romanos, sino que fue quizá introducido en época romana o altomedieval".

Dentro de la zona indoeuropea hay dos lenguas claramente diferenciadas, el lusitano y el celtibérico. El Celtibérico lengua céltica de rasgos arcaicos, documentado en inscripciones realizadas en escritura ibérica, lo cual es una dificultad adicional por las carencias de la escritura ibérica para reproducir una lengua distinta a la ibera, y el Lusitano, como lengua es el único ejemplo en la península que podemos contraponer al celtibérico como otro dialecto indoeuropeo que ha llegado a nosotros; en el año 1935 Herrando Balmori afirmaba que estaba escrita en un dialecto céltico arcaico.

Mientras que en la zona no indoeuropea encontramos la lengua del Suroeste de la Península, donde se realizó la más primitiva escritura hispánica, con testimonios por todo el Levante, el valle medio del Ebro y Cataluña, el ibero de distintas tribus que poblaban la Iberia 600 años a.n.e., ver mapa (España pre-romana). El celtibérico junto con el ibero fueron influenciados a su vez por fenicios y griegos, una asimilación debida en gran parte a contactos comerciales, o por invasiones como fue la celta, cartaginesa, romana e indoeuropea.

El castellano existió y el español existe a pesar de querer ignorarlo determinadas personas a la que su chovinismo les ciega, se ha celebrado el VI Congreso Internacional de la Lengua Española en Panamá ente el 20 y 23 de octubre del 2013, con 20 países hispanohablantes más EE U; pero si insisten en decir que tienen un idioma propio sin influencias, podrían probar con el idioma de los iberos que aparecen en el mapa (pre-iberos e iberos), entonces eran idiomas verdaderamente propios, como el layetano, auson, cosetano…, no producto del comercio o de las invasiones.

Siento autocitarme, pero solo hablo del idioma español, sin mencionar para nada la forma de Estado, ver2, pero si quieren mi opinión sobre las nacionalidades puedes leer3, también me extraña la xenofobia demostrada al decir ser militante del PSUC, porque no has entendido los principios del socialismo, su lema, Libertad, Igualdad y Fraternidad, y el idioma no es una causa para la independencia xenófoba que proclamas.

1. A vueltas con nuestro idioma http://www.vitrubio03.es/?p=3454

2. Defendiendo y reivindicando el español http://www.vitrubio03.es/?p=4663

3. Estatalismo nacionalista http://www.vitrubio03.es/?p=3611

LA LENGUA VIVA







La comunicación deshumanizada
Amando de Miguel en Libertad Digital


No es cierto que el lenguaje y los símbolos hayan hecho que en nuestra sociedad estemos mejor comunicados y la vida sea más fácil que en el pasado. Hay mil ilustraciones sobre esa irritante deshumanización en los mensajes que recibimos por todas partes. Lo que sí ha progresado es su cantidad. En el buzón del cartero ya no hay más que papeles de bancos, multas de tráfico y propagandas inanes. Pero el correo electrónico rebosa a todas horas de comunicaciones, mensajes y solicitudes de toda índole. Una gran parte de esos correos los emiten personas que no conocemos. Lo malo es que ha aparecido una nueva exigencia social: abrir el correo electrónico todos los días. Es más, muchas veces se nos exige que contestemos a vuelta de correo, como antes se decía.

Antes se comentaba que una definición de analfabeto era la persona incapaz de entender un documento oficial, un oficio cualquiera. Hoy sabe leer casi toda la población, pero ni siquiera un título universitario faculta para descifrar el recibo de la luz (= electricidad) o los siniestros papeles de la Agencia Tributaria. A ver quién es el listo que sabe hacerse con el contenido de un contrato de seguros o de asistencia técnica. Necesitamos trujimanes para que nos interpreten todo eso.

No intente usted entender lo que dice un informe médico sobre su persona. Solo está claro para otro profesional sanitario. En esas hojas cabalísticas bailan las siglas en todo su esplendor. Hay que ver las vueltas que dan los galenos para que no aparezca la vitanda palabra cáncer. Tampoco es manca la literatura de los prospectos de las medicinas. Su función es la de aterrorizar al paciente. Lo consiguen, claro.

Por todas partes florecen los letreros de "prohibido", a veces "terminantemente prohibido". Por lo menos ha desparecido aquel viejo cartel de "Se prohíbe bajar en ascensor”. No se colige bien quién prohíbe tantas cosas y por qué. Nos acercamos a la estación de la Renfe (o como se llame ahora) para recibir a un colega que llega de un lugar lejano. No se puede pasar, no ya al andén por donde se desplaza el tren, ni siquiera al espacio donde hasta hace poco se recibía a los viajeros. Da la impresión de que la proximidad a los que bajan del tren puede ser causa de alguna enfermedad contagiosa.

Por todas partes nos rodean ejércitos de siglas, acrónimos y logotipos difíciles de descifrar. Se nos obliga a retener cifras inverosímiles de la cuenta del banco, de las claves fiscales, de la afiliación a Muface (otro acrónimo), del DNI (este es más fácil). Los cachivaches electrónicos nos fuerzan a proveernos de números secretos para operarlos. Solo nos falta que nos los implanten en el cerebro. Nos dicen que toda esa complicación es por nuestra seguridad. No se me alcanza.

En teoría, la comunicación verbal se ha facilitado enormemente con el teléfono ubicuo. Pero intente usted llamar a una persona con alguna responsabilidad, por ejemplo, para cobrar un recibillo. No hay forma. Lo más probable es que un frío edecán le conteste: "Deje usted su teléfono; ya le llamarán". Y no llaman, claro. Eso cuando la llamada no entra en un contestador programado: "Si desea hablar con Contabilidad, marque uno; con Atención al Cliente, marque dos", etc. Todo eso, a veces, después de un ratito de música clásica.

Los ejemplos anteriores ilustran la dificultad para comunicarnos que hoy nos acecha. Cada vez son más las personas encargadas de controlar, vigilar, filtrar, inspeccionar, supervisar, evaluar, intermediar, auditar lo que nos corresponde a la gente del común. Por lo mismo son innúmeras las personas dedicadas a elaborar leyes, reglamentos, protocolos de actuación, normas de todo tipo. Se comprende que tenga que justificar sus respectivos sueldos, pero al final nos hacen la vida imposible.

LA RECOMENDACIÓN DIARIA:

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