Translate

segunda-feira, 8 de setembro de 2014

LA LENGUA VIVA






El lenguaje de Adán y Eva
Amando de Miguel en Libertad Digital



Muy sencillo. Cualquier grupo humano sobre un territorio –tribu, nación– necesita comunicarse entre sus habitantes. Para ello diseña un sistema de signos –orales, escritos y simbólicos– para que sus miembros hagan posible una vida de relación. Pero la función latente es conseguir que los de fuera, los bárbaros, no los entiendan. De ahí que las lenguas se dividan y subdividan sin cesar. El resultado es que coexistan muchos idiomas, dialectos y demás variantes, con parecidos muy notables entre ellos.

Fue un gran descubrimiento de la lingüística la teoría de la unidad básica de las lenguas indoeuropeas, las que se desparraman desde Indonesia hasta Islandia. Señalo como ilustración la gran semejanza que existe en la manera de decir "uno, dos, tres" en diferentes lenguas de ese vasto territorio. A los ojos y los oídos de una persona corriente, esos idiomas parecen cada uno de su padre y de su madre, pero se hallan emparentados. Veamos: Español: uno, dos, tres. Albanés: njé, dy, tre. Alemán: eins, zwein, drei. Bengalí: ek, dui, tin. Bielorruso: adzyin, dua, tri. Búlgaro: edin, dva, tri. Cachemir: akh, seh, trih. Catalán: un, dos, tres. Checo: jeden, dua, tri. Corso: unu, dui, tre. Curdo: yet, du, se. Danés: en, to, tre. Eslovaco: jeden, dua, tri. Esloveno: en, dva, trije. Francés: un, deux, trois. Frisón: ien, twa, trije. Escocés: aon, da, tri. Galés: un, dad, tri. Gallego: un, dous, tres. Griego moderno: enas, duo, treis. Hindi: ek, du, tin. Holandés: een, twee, drie. Indonesio: satu, dua, tiga. Inglés: One, two, three. Irlandés: a haun, a do, a tri. Islandés: einm, tweir, brir. Italiano: un, due, tre. Lituano: vienas, du, trys. Nepalés: ek, dui, tin. Pasto: yak, dwa, dre. Persa: yak, do, sih. Polaco: jeden, dwa, trzy. Portugués: um, dois, tres. Romaní (gitano): ek, dui, trin. Ruso: odin, dva, tri. Sánscrito: ekas, duau, trayas. Serbocroata: jedan, dva, tri. Sueco: en, tua, tre. Ucraniano: odin, dva, tri.

La semejanza de las voces resulta asombrosa. Se podría prolongar a otros números y a ciertas palabras básicas. Sorprende sobre todo el acuerdo prácticamente unánime en el sonido t para designar el número tres. Es un sonido dental muy fácil. Los niños de todas las culturas lo aprenden enseguida junto a m, b y p. De ahí que esos sonidos elementales se asignen en muchas lenguas, no solo indoeuropeas, a las palabras que designan madre, padre, abuelo, tío, tata, tato, teta. En español y en otros idiomas la t se degrada muchas veces en d. Así, el patrem latino pasa a ser padre en español.

La letra T en muchos alfabetos responde a la idea elemental de cruzar dos palos. En inglés hay diversas palabras compuestas para indicar la forma de t. Así, la t-shirt (= camiseta) o la t-bone (chuleta). En inglés y en español los constructores se refieren a las vigas en forma de T.

Si hubiera que componer un nombre comercial valedero sin traducir para docenas de países sugeriría Tre o Tri. Hay muchos símbolos mágicos con esas voces: tridente, trinidad, tribu, tribuno, trenza, triglifo, triángulo. El niño que aprende los números empieza con uno y dos, muy fáciles de entender. Al pasar a tres se produce un salto cualitativo. Tres es ya cantidad. Los romanos decían que tres facium collegium (= con tres personas se forma una sociedad). En inglés se dice three is company. En italiano troppo y en francés trop equivalen a mucho. De forma parecida, en español tropa, tropecientos, tropel nos proporcionan también la idea de una gran cantidad. Son vestigios de una época primigenia en la que los homínidos seguramente no sabían contar más allá de dos. Tuvo que ser un descubrimiento empezar a decir "a la una, a las dos, a las tres". Era el momento de iniciar algo decisivo.

Nenhum comentário:

LA RECOMENDACIÓN DIARIA:

  LA RECOMENDACIÓN DIARIA el maratón  y  la maratón ,   formas adecuadas   La palabra  maratón  puede emplearse tanto en masculino  ( el mar...